PERROS POLICÍA

Perros de la unidad canina de la Policía Nacional vigilan los centros escolares para detectar posible menudeo de droga, sobre todo hachís. El 'camello' suelo ocultar la droga dentro, por ejemplo, de un paquete de chicles. El comprador, entre los 13 y los 16 años, lo recoge y deja el dinero en el mismo lugar. Ese suele ser el modus operandi para pasar droga en los institutos. En las redadas, los perros también han encontrado sustancias en los bolsillos de los alumnos, en huecos de las paredes, y en setos de los jardines.Si la policía encuentra a un escolar con una pequeña pieza de hachís, la sanción puede ir de los 300 a los 3000 euros.Los padres de alumnos y los profesores de los centros vigilados han aplaudido la medida.